Probablemente la mejor forma para difundir la arquitectura verde en México sea la difusión de los beneficios económicos y fiscales que esta genera.
En los últimos años, el interés por crear arquitectura sustentable o verde ha empezado destacar en México y cada día resulta ser más atractiva debido a que se puede ahorrar entre 30 a 40% de los costos de operación si se aplica bien. Esto se consigue porque requieren menos energía eléctrica y aprovechan los recursos naturales. Sin embargo, más importante que los ahorros económicos es que la arquitectura verde ayuda a conservar el ambiente.
Tener la capacidad de entender la importancia de conservar el ambiente nos permite comprender que la arquitectura sustentable se debe proponer un objetivo que no sea únicamente los ahorros en costos. Debe considerar las necesidades de las poblaciones aledañas y esto no implica que se vaya a olvidar que el cliente debe recibir una construcción de calidad que perdure, ahorra energía y agua, entre otros.
En Mengual tenemos un compromiso con el medio ambiente. Disponemos principalmente de madera, para poder empatizar con el medio ambiente y crear proyectos propios y únicos mediante los cuales podréis obtener así proyectos sostenibles.
Los arquitectos deben considerar el impacto que generan en el ambiente con un mal diseño a los pobladores aledaños y por supuesto en el cliente. Esto nos puede llevar a concluir que muchas veces es más sustentable y económico hacer más eficientes los edificios existentes, que tratar de crear una obra completamente nueva desde cero.
Si comparamos a México con otros países, nuestras leyes son menos estrictas con respecto a las regulaciones en la construcción, sin embargo, poco a poco se dirigen hacia una homologación internacional. En México aún no es obligatorio el considerar la sustentabilidad ya que en la construcción todavía no hay leyes o lineamientos ecológicos que se deban respetar. De hecho, los avances que se han conseguido en las regulaciones han sido promovidos mayoritariamente por la sociedad civil y por la iniciativa privada. Es entonces que la falta de legislación gubernamental, la mala implementación de la legislación existente, en conjunto con la poca difusión que se hace sobre la arquitectura sustentable que frena su aplicación.
Un ejemplo de ello es que en la CDMX el gobierno arrancó el Programa de Certificación de Edificios Sustentables (PCES) en 2008, pero más de 10 años después son pocos los que conocen los beneficios de esta certificación que van desde los descuentos fiscales y descuentos en pagos de predial, licencias de construcción, hasta el financiamientos a tasas preferenciales y menor tiempo en la ejecución de trámites.
Si se quiere arrancar con la creación de arquitectura sustentable en México, un primer paso debería de ser conocer las normas locales ya existentes. Algunas de ellas son la NMX-AA-164-SCF1-2013 de Edificación Sustentable, la NMX-AA-171-SCFI-2014 de Requisitos y Especificaciones de desempeño ambiental de establecimientos de hospedaje, la Hipoteca Verde del Infonavit, entre otros. Los arquitectos mexicanos no conocen estas normas locales, pero sin embargo, conocen ampliamente las internacionales tales como el LEED y el Living Building Challenge del International Living Future Institute.
Estos, por lo tanto, quieren aprovechar su posición privilegiada como arquitectos para promover la arquitectura sustentable en su país y la certificación de edificios sustentables. Recordemos que es buena tanto para el ambiente como para la reducción de costos.